Avanza en el congreso proyecto que regula y reglamenta el oficio de Traductores e Intérpretes Oficiales
En comisión sexta de la Cámara de Representantes aprobó en primer debate el proyecto de ley que busca regular y reconocer la labor que hacen los traductores e intérpretes oficiales en los trámites y documentos que se realizan en idioma diferente al castellano.
Esta iniciativa, autoría de las congresistas del Partido Cambió Radical, Ángela Sánchez y Emma Claudia Castellanos delimitará las responsabilidades y competencias que los traductores e intérpretes oficiales tienen y otorgará seguridad jurídica a los usuarios a través de la unificación normativa de la actividad.
Los traductores e intérpretes oficiales desempeñan su actividad desde 1951 en virtud del Decreto 382, es decir que han trabajado por casi 70 años bajo los mismos estándares, sin embargo, esto cambió con la Resolución 10547 de 2018.
Dicha resolución eliminó el directorio de consulta de traductores e impuso la obligación de reconocimiento o autenticación de la firma del traductor oficial ante Notario público para legalizar o apostillar los documentos.
“Esto ha puesto en riesgo a los usuarios y traductores a ser víctimas de suplantaciones, falsificaciones, imprecisiones y errores en los documentos que serán legalizados o apostillados sin ninguna verificación de idoneidad de los mismos”, manifestó la representante Sánchez.
Y añadió “por esta razón, hoy buscamos con esta iniciativa dar solución a esta problemática, regular y reconocer la labor que hacen los traductores e intérpretes oficiales en los trámites y documentos que se realizan en idioma diferente al castellano, delimitar las responsabilidades y competencias que los traductores e intérpretes oficiales tienen y otorgar seguridad jurídica a los usuarios a través de la unificación normativa de la actividad.
“Las traducciones y las comunicaciones en idiomas extranjeros hoy tienen gran acogida y son de necesaria utilidad, resultan una herramienta para fomentar el comercio internacional de Colombia, la generación de empleos y el sustento de un importante número de familias que hoy dependen de la actividad de los traductores e intérpretes”.
Ahora este proyecto de ley avanza a la plenaria de la Cámara para su segundo debate.