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La Fundación Carlos Lleras Restrepo y Cambio Radical presentan el documento oficial: ¿Hacia dónde debe ir el sistema de salud?

La Fundación Carlos Lleras Restrepo y Cambio Radical presentan el documento oficial: ¿Hacia dónde debe ir el sistema de salud?

• Este documento compila las principales conclusiones y recomendaciones para avanzar hacia una reforma al sistema de salud en Colombia, surgidas en el marco de los foros realizados en Bogotá, Cali, Barranquilla y Neiva entre el 11 de abril y el 16 de mayo.

• El documento completo puede consultarse en el siguiente link: https://www.partidocambioradical.org/wp-content/uploads/2024/09/MEMORIAS-FOROS-SALUD-INTERNAS.pdf

Bogotá, 11 de septiembre 2024. Entre los meses de abril y mayo la Fundación Carlos Lleras Restrepo, en alianza con el Partido Cambio Radical, organizó una serie de foros con el propósito de analizar los principales avances, hitos y desafíos, así como determinar los elementos a tener en cuenta para una reforma al Sistema General de Seguridad Social en Salud.

El objetivo principal de estos fue promover una discusión técnica que considerara la perspectiva territorial y la visión de los distintos actores que hacen parte del sistema de salud y permitiera dilucidar los resultados de los últimos 30 años, así como sus retos y desafíos, con el propósito de identificar los hitos relevantes para avanzar en su reforma. Así, las conclusiones de estos encuentros constituyen un insumo indispensable para la discusión legislativa que se avecina.

Respecto a la relevancia del diálogo propuesto y sus conclusiones, Germán Vargas Lleras, director de la Fundación Carlos Lleras Restrepo y líder natural de Cambio Radical afirmó: “Sabemos que hay que introducir mejoras al sistema de salud, es evidente que no es perfecto. Demanda reformas y la inclusión de trascendentales mejoras, pero sobre el principio de mantener los importantes avances alcanzados en los últimos 30 años. Nuestro propósito es promover un sistema de salud sensible, eficiente y sostenible”.

En ese mismo sentido, el senador Carlos Fernando Motoa, explicó: “Nuestra propuesta responde a que el Gobierno sigue generando zozobra e incertidumbre sobre el sistema de salud y sigue perjudicando, por supuesto, a los pacientes en todo el país. Vemos, a la fecha, en el Gobierno de Gustavo Petro, cerca de cuatro EPS liquidadas, seis intervenidas y 15 en riesgo; traslados masivos de afiliados; una mala prestación de los servicios; y el no pago de los recursos al sistema”.

En este sentido, los foros: ¿Hacia dónde debe ir el sistema de salud? revelaron un consenso sobre la necesidad de una reforma al sistema de salud planificada, dialogada y consensuada, que aproveche los aprendizajes acumulados en las últimas décadas y que, en caso de ser necesario, considere un período de transición suficientemente amplio para generar las capacidades que requieren los actores y alcanzar la quíntuple meta, es decir, un sistema con: 1) mejores resultados en salud; 2) alta satisfacción de los usuarios y experiencia de atención en salud; 3) más eficiente, esto es que permita o bien incrementar los resultados en salud con los costos actuales o disminuirlos; 4) más bienestar del talento humano en salud; y 5) más equitativo y que supere la heterogeneidad en el acceso entre zonas rurales y urbanas.

Es importante resaltar que, con ocasión de este ejercicio y a partir de las conclusiones de los foros liderados por la Fundación Carlos Lleras Restrepo, Cambio Radical en su compromiso con la garantía del derecho fundamental a la salud de todos los colombianos, radicó el 31 de julio, ante el Congreso de la República un nuevo proyecto de ley Estatutaria de Reforma a la Salud.

“Conscientes de que no se va a poder avanzar en ninguna interlocución, sobre ningún tema que se tramite en el Congreso, tomamos la decisión de radicar nuestro proyecto de reforma a la salud, con 23 artículos que van al grano y permitirán solucionar los problemas que hoy se presentan en el sistema de salud”, afirmó el exvicepresidente, Germán Vargas Lleras.

“Agradecemos a los parlamentarios, que a lo largo de estos meses estuvieron activos en la organización de estos foros, y a todos aquellos técnicos que contribuyeron con su participación, ideas, experiencia y conocimiento. Yo creo que el tiempo nos va a dar la razón, en la necesidad urgente de proteger el sistema de salud de Colombia”, concluyó.

A continuación, las conclusiones y recomendaciones de los foros organizados por la Fundación Carlos Lleras Restrepo en Bogotá, Cali, Barranquilla y Neiva entre el 11 de abril y el 16 de mayo:

• El Sistema General de Seguridad Social en Salud es el mayor logro social de los últimos 30 años en el país. En consecuencia, no se debe pretender la sustitución del modelo de aseguramiento sino su fortalecimiento, teniendo como eje central el posicionamiento del paciente como prioridad, con la libre elección como pilar básico.

• Dado que uno de los principales logros del sistema de salud ha sido el incremento progresivo de la afiliación y acceso a los servicios de salud, con cobertura universal, pues más del 99% de la población está afiliada al Sistema General de Seguridad Social en Salud, debe mantenerse la convergencia de los regímenes subsidiados y contributivo, garantizándose el mismo nivel de atención y plan de beneficios.

• Existe consenso frente a la necesidad de mantener el aseguramiento en salud, lo que implica evitar la fragmentación y la inseparabilidad entre la gestión del riesgo en salud y la administración del riesgo financiero. Así mismo, se concluye que la gestión integral del riesgo en salud, en la medida en que articula y coordina a los actores para lograr una identificación e intervención de los riesgos, no puede desligarse de la conformación de las redes, la representación de los afiliados ni de la garantía de calidad.

• Para que el aseguramiento funcione adecuadamente deben hacerse ajustes. En términos financieros, es necesario que la prima que reciben los aseguradores para gestionar el riesgo en salud sea suficiente y se distribuya de mejor manera, considerando además de factores demográficos y de ubicación geográfica, la diferencia en la carga de enfermedad, entre otros. Así mismo, para las zonas geográficamente dispersas, se requieren modelos diferenciales basados en la oferta.

• En cuanto a las intervenciones por parte de la Superintendencia Nacional de Salud, se planteó que estas deben utilizarse como mecanismo de última instancia que permita preservar las capacidades acumuladas y garantizar la gestión del riesgo en salud de los afiliados. Históricamente, las intervenciones realizadas no han permitido mantener buenos niveles de atención ni recuperar los indicadores financieros. Las subsecuentes liquidaciones han dejado deudas para los prestadores y proveedores, sin que exista perspectiva de recuperación. En el contexto actual, las EPS intervenidas por el gobierno concentran alrededor del 50% de la población sin que se observen mejoras en los indicadores de salud o financieros.

• Se evidencia la necesidad de diseñar un sistema nacional de cuidado que considere fuentes adicionales para la financiación de los servicios sociales complementarios.

• Es necesario evaluar y fortalecer los mecanismos de puerta de entrada para garantizar costo eficiencia en los nuevos tratamientos disponibles para la población colombiana. Al mismo tiempo, se requiere incrementar la corresponsabilidad de los pacientes en el cuidado de la salud, así como fomentar la educación en salud y la importancia de robustecer la promoción de la salud y prevención de la enfermedad.

• Así mismo, se plantea la posibilidad de lograr mayor integralidad de servicios y de articulación entre toda la cadena de prestadores y gestores farmacéuticos, que permita aliviar la carga administrativa que recae sobre los usuarios.

• Frente a las preocupaciones de que se destruyan las actuales redes de servicios y que los ajustes se realicen a costa de la prestación, existe consenso en que cualquier propuesta de reforma y evolución del sistema debe estar orientada a generar garantía de calidad en la prestación, partiendo de las necesidades actuales de atención y consumo de servicios, considerando el contexto del envejecimiento, que incrementará el costo del sistema en el mediano plazo, así como las necesidades en materia de atención de enfermedades raras y salud mental.

• Las propuestas de reforma del sistema de salud no deben orientarse hacia la monopolización estatal. Así, no se comparte el propósito de estatizar la conformación de las redes. Las alcaldías y gobernaciones carecen de las capacidades para organizar las redes de servicios y ejercer control a todos los convenios. Además del riesgo burocrático y clientelista, esta medida implicaría un alto riesgo de perder las redes que a la fecha se encuentran consolidadas, teniendo en cuenta que deberán aceptar la imposición de tarifas, e iría en detrimento de calidad de la atención.

• Existe consenso frente a la necesidad de organizar la prestación en redes integrales e integradas organizadas territorialmente. La territorialización de las redes mejora la disponibilidad de servicios, incrementa el acceso y evita que los usuarios deban desplazarse largas distancias para obtener la atención que requieren.

• En zonas rurales de baja dispersión poblacional, deben diseñarse modelos de atención diferenciales que consideren las capacidades territoriales y las necesidades de la población.

• Los subsidios a la oferta deben ser focalizados en función de las necesidades identificadas en los territorios, contrario a lo que promueve el actual Gobierno.

• Se insiste en mejorar la gobernanza del sistema. Los hospitales públicos deberían contar con normas de gobierno corporativo, que permitan disminuir la corrupción y aíslen el manejo del hospital del sistema político y del clientelismo.

• En lo relacionado con la integración vertical, se enfatiza en su regulación, con reglas claras del juego y mayores controles.

• Se esbozó la importancia de permitir que las instituciones prestadoras del servicio de salud tengan la posibilidad de acogerse a la Ley de Insolvencia 1116 de 2006.

• Se enfatiza en considerar las condiciones clínicas y de oferta actuales e incluir la transformación digital como eje fundamental del modelo bajo esquemas de información interoperables. Lo anterior, alineado con el propósito de no fragmentar la atención de los pacientes y mejorar las condiciones de calidad, dinamicidad en la oportunidad y acceso de manera integral, al tiempo que se garantice transparencia de flujos, trazabilidad y resultados en salud.

• Para garantizar la integralidad en la atención es necesario garantizar la articulación de las funciones básicas del aseguramiento. Esto implica articular la gestión del riesgo en salud con la conformación y articulación de redes para la prestación del servicio, la representación del afiliado y el establecimiento de una ruta clara para los pacientes en los distintos niveles de complejidad, así como la garantía en la calidad de la prestación.

El mayor reto del sistema de salud está relacionado con la financiación y sostenibilidad. Existe consenso técnico sobre la desfinanciación del sistema, destacándose tres causas: 1) los usos del sistema han crecido por encima de las fuentes disponibles, lo que ha supuesto presiones crecientes sobre el Presupuesto General de la Nación; 2) la UPC estimada por el Ministerio de Salud no es suficiente para financiar la totalidad del gasto requerido por la población, lo que ha acelerado las pérdidas de las aseguradoras, la disminución de las reservas técnicas y la acumulación de pasivos; 3) decisiones de política del gobierno nacional han sustraído recursos del aseguramiento para otros usos.

Las cifras de siniestralidad demuestran que, contrario a lo que señala el Ministerio de Salud, la UPC es insuficiente para financiar la totalidad de gastos en salud que requiere la población colombiana.

• Existe consenso entre los actores del sistema sobre la necesidad de incrementar el nivel de transparencia y control de las cifras a través de sistemas de información robustos y de sincerar las cifras actuales y futuras para entender mejor, tanto las necesidades esperadas como las posibilidades de financiamiento, partiendo de un diagnóstico de capacidades de todos los actores que permita establecer las corresponsabilidades de cada partícipe.

• La UPC debe considerar ajustadores de riesgo por condiciones de salud, de manera que las aseguradoras que concentren población con mayor carga de enfermedad sean compensadas de manera justa y evitar los incentivos para la selección de riesgo por parte de las EPS.

• Es imperativo buscar nuevas fuentes de financiación para el sistema de salud. A manera de ejemplo, los expertos discutieron la posibilidad de revisar las exenciones contenidas en el Estatuto Tributario frente al aporte patronal para ciertos grupos de ingresos.

• Así mismo, recomendaron profundizar la implementación de impuestos saludables, como incrementar la carga tributaria al tabaco, con destinación específica para el sistema de salud.

• Es crucial concienciar que la salud no solo puede, sino debe ser un negocio rentable, dado que de ello depende el pago de salarios a médicos, especialistas, personal administrativo y la adquisición de tecnologías. Sin embargo, al ser recursos públicos, su trazabilidad debe ser transparente y cada gasto justificado.

• Si bien el sistema de salud debe estar en función de los pacientes, una condición necesaria para lograrlo pasa por brindar condiciones mínimas que permitan desarrollar al Talento Humano en Salud -THS. Esto implica, por un lado, la formalización laboral de los trabajadores del sector salud, como la democratización del acceso a la formación posgradual a través de becas.

• La mayor parte de la falta de oportunidad en el acceso se explica por el déficit de especialistas. A su vez, este déficit se debe, principalmente a los pocos cupos anuales dispuestos por las facultades de medicina. En ese orden de ideas, se requiere lograr mayor articulación entre las instituciones, con especial énfasis en el Estado como ente regulador, para generar más oportunidades de estudio posgradual. En el corto plazo, podría considerarse un plan de choque que permita ampliar la oferta de talento humano en salud disponible en el país, con énfasis en incrementar el número de especialistas.

Para más información, el documento completo: ¿Hacia dónde debe ir el sistema de salud? puede consultarse en https://www.partidocambioradical.org/wp-content/uploads/2024/09/MEMORIAS-FOROS-SALUD-INTERNAS.pdf

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