Subir precio de gasolina golpeará a los más pobres
- Hay que ser responsables fiscalmente, pero más importante es proteger a los más pobres
- En el país ruedan más de 10 millones de motocicletas
El aumento de los precios de gasolina es un mal necesario y es inevitable para evitar mayores impactos fiscales a la Nación, pero un incremento que no sea gradual y con mecanismos de protección a los más pobres, puede terminar generando un nuevo estallido social en el país. Así lo señala el representante a la Cámara por el Huila, Víctor Andrés Tovar Trujillo, añadiendo que cualquier decisión al respecto no debe ser apresurada ni basarse en datos falsos o con sesgo político.
“Un aumento generalizado y súbito de los precios de gasolina y diésel afecta a toda la población, pero mucho más a los bajos estratos socio económicos pues el efecto inmediato es el de mayor costo de vida, que además ya lo tenemos en niveles históricos”, dijo Tovar Trujillo.
A su juicio, la decisión responsable con las finanzas del país debe ser aún más responsable con los más pobres. “No es una decisión fácil pero tampoco es una sorpresa; el déficit del fondo de combustibles viene desde hace dos años, cuando el gobierno Duque decidió bajar la gasolina para no afectar más a la gente en medio de la grave crisis por la pandemia”.
Tovar Trujillo hizo un llamado al gobierno Petro para que cualquier aumento sea gradual, a mediano plazo y con efectivos mecanismos para proteger a las clases menos favorecidas. “Tenemos, por ejemplo, más de 10 millones de motocicletas en el país, de las cuales la inmensa mayoría pertenece a familias pobres, millones de campesinos entre ellas, que las usan sobre todo como herramienta de trabajo. En ellos es que tenemos que pensar”.